16.7.08

Souffle Beryl Hight (Dietético)

INGREDIENTES:
  • 3 Sesos de modelo rubia; futbolista, (selección a gusto); comentarista deportivo (evitar la clase Niembro, sumamente indigestos), rockero (previamente macerados en sancocho de sexo, droga y rock-and-roll); conductor televisivo (programas de chimentos, talk & reality shows, almuerzos paquetes, sueños pesadillescos, concursos, etc.); cualquier otro que, a su juicio, reúna las características necesarias.

  • 100 gramos de manteca ligth (indispensable para la primera variedad; el análisis de las demás podrá revelar si la materia grasa está inclusa.)

  • 50 gramos de harina (recomendamos “De Otro Costal”). Evitar la marca “Mala Farina”, aconsejable para platos mediterráneos de corte más familiar. También puede utilizarse harina de lenteja.

  • ¼ litro de leche agria (marca “Má Laleche” que, casualmente, nos auspicia) batida a punto Pura Espuma.

  • 4 yemas - 4 claras. Utilizar huevos de chorlito, pavo, ganso, loro barranquero, etc. (como resulta obvio, hay que romperlos cuidadosamente antes)

  • Sal de Ahí, Pimienta Másvien Verde, Nuez Amoscada, a gusto; Ají “Poko-O-Nada Edu Kado” en cantidad; 1 cucharada de Campo Orégano; 1 Cucharada de Comino “Meim Portaun”

  • Un buen puñado de gallofas surtidas (cotilleos, bulos, filfas, patrañas, etc.).

  • Camelos para espolvorear


PREPARACIÓN
Colocar la manteca en recipiente apto para soportar la exposición a rayos catódicos. Ubicar frente a un televisor encendido. (No es conveniente permanecer cerca mientras se produce el proceso de licuefacción).
Tiempo requerido: dependerá de la frecuencia sintonizada (no elegir una de contenido cultural y educativo de algún tipo, esa clase de radiación puede malograr la receta).
Si fuera necesario, picar bien los sesos; añadirlos al recipiente; incorporar la harina; alternando con la leche; mezclar bien.
Añadir el puñado de gallofas. Notaremos como, al empezar a calentarse, se forman grumos del tipo pelotera. Agregar enseguida los condimentos. Batir enérgicamente.
(Advertencia: Dado el marcado incremento de temperatura que dicha acción producirá, aconsejamos usar delantal de asbesto impermeable y antiparras. Esto nos protegerá de las inevitables salpicaduras provenientes del efecto “ventilatis merdus”, consecuencia inmediata del súbito calentamiento.)
Dejar entibiar con tandas de publicidad y paños fríos.
Agregar las yemas de a una, integrándolas bien a la preparación.
Por último, añadir las claras a nieve para enfriar la mezcla. Comprobaremos que, de todos modos, seguirá en ebullición por tiempo indeterminado.
Tratar de meterla en algún molde capaz de contener su inexplicable expansión y, si esto se logra, espolvorear con camelos; llevar al horno apagado. Dada la intrigante multiplicación de reacciones químicas internas, el plato se cocinará solo.
Cuando un hedor a Camembert y Riachuelo llegue a sus narices, apague el televisor, tome el soufflé y tírelo a la basura..
Y no se lamente por el presunto fracaso, ¡todo un éxito para su programa dietético!
Invariablemente, este plato resulta incomible; el ayuno, sumado al ejercicio de batido, ayuda a combatir esos kilitos de más.
A cambio, ingiera varias porciones de Microcuentos Impuros, o un buen libro marca “Alimento para el alma”.
Ambos pueden consumirse en cantidad sin afectar en nada la balanza.

13.7.08

Sopa de la Abuela

Del Capítulo 3 “Sopas Familiares” del libro “Sopas, Pastas & Panes”

Se coloca agua en una cacerola mediana, una cucharada sopera de aceite de oliva, sal a gusto, trozos de verduras varias cortadas en juliana. Se pone a fuego lento hasta que se ve que más o menos está lista. Se sirve en plato sopero, acompañada de queso rallado.

Ahora, para dar sabor a la preparación, en lugar de un caldito de carne, Usted utilizará una porción de la abuela, que puede ser un dedo, una mano o un pié. Es recomendable que la operación de amputación no la hagan los niños, porque el uso de hachas o tijeras de podar es peligroso para ellos; pero sí pueden presenciarla; siendo un espectáculo original y educativo para ellos y la familia.

Debe tener la precaución de hervir bien la pieza añadida a la receta, porque las abuelas suelen ser duras

Por supuesto, es una comida especial que no podrá repetir muchas veces, salvo que la suya sea una de estas familias modernas, donde están los tuyos, los míos y los nuestros; y las ancianas abundan.

Recuerde desangrar la pieza amputada, para no amorcillar la sopa. La sangre recogida puede dársela de beber a la abuela una vez que se recupere. Al fin y al cabo, es de ella.

12.7.08

Sopa Minimalista

Del Capítulo 8 “Sopas Artísticas” del libro “Sopas, Pastas & Panes”

Si bien los detractores de esta escuela artística, el Minimalismo, insisten en que esta receta no tiene nada de artístico; y en cambio no sería otra que la tradicional Sopa de Pobre; nosotros insistimos en que el arte está en quien lo aprecia; y como tal, incluimos la receta en este capítulo.

Se coloca una taza de agua en una cacerola mediana, una gota de aceite mezcla, un dadito de carne (para dar sabor), un dadito de papa, una uña de hoja de acelga y un fideo tirabuzón. Se pone a fuego lento hasta que se ve que más o menos está lista. Se sirve en plato sopero, acompañada de una pizca de queso rallado.

Si los comensales son más de uno, poner un ingrediente de cada, por persona extra.

Apreciemos que esta preparación respeta los preceptos del minimalismo, habiéndose desnudado a lo esencial y estando despojada de elementos sobrantes.

Vermicelli con salsa Circe de Cortázar

La entomofagia es un placer de reyes y emperadores, pero es bien conocida la aversión occidental a degustar insectos, artrópodos o gusanos. La solución es entonces disfrazar el manjar que uno va a presentar en la mesa, dispuesto de tal modo que engañe al más pintado. Esta receta es para agasajar a un invitado de honor, pero tenga en cuenta no revelar la verdad a menos que desee contemplar la rauda huída que éste hará de su mesa, su casa y su vida.

Ingredientes:
Pasta:
½ kg. de gusanos vermes, claros y brillantes.
200 g.de harina
1 huevo batido
5 l.de agua
Salsa:
1 1/2 kg.de cucarachas grandes.
100 g.de manteca
2 cucharadas de harina
1 vasito de vino blanco
pimienta a gusto.

Preparación:
Hervir el agua. Rebozar los vermes en abundante harina. Pasar por huevo batido y nuevamente por harina. Tomar cada gusano y echar en el agua hirviendo, uno por uno, hasta que deje de contraerse. Retirar con espumadera y colocarlos juntos en una fuente. Repetir la operación hasta terminar con todos. deben quedar con aspecto de "fideos gruesos". Reservar al calor. Para la salsa habrá juntado unas cien cucarachas, cantidad que se aproxima al kilo y medio. Sumergirlas en agua caliente hasta que dejen de patalear. Cuele, deje enfriar y proceda de la siguiente manera con cada una: quite las patas y alas de cada insecto y reserve. Con dos dedos oprima el abdomen hasta extraer su contenido blanquecino, que juntará en una cazuela de barro. Mezcle esa pasta con la manteca, el vino y lleve a hervor. Al final, agregue harina para espesar. Pique finamente las partes reservadas (patas y alas) y fríalas en manteca hasta que queden crocantes. Una esta preparación a la anterior.
Salsee los vermes y sirva con champaña bien helada.
¡Bon apetit!

3.7.08

Pastel de Papas

Del Capítulo 53, “Cocine a sus Seres Queridos”, del libro “Sopas, Pastas & Panes”

Esta es muy trivial.
Comida típica del Vaticano que se hace con reliquias molidas de antecesores de Benedicto XVI. Es una comida costosa y su receta, secreta. Se sabe que debe hacerse de noche, preferentemente cuando la Guardia Suiza duerme; y es una de las razones por las cuales todas las tumbas de la Basílica de San Pedro se están quedando vacías.
¡Ojo!: que no le quieran vender gato por liebre. No es lo mismo que un Pastel de Obispos, ni de Monjes y mucho menos de Curitas del Barrio. Aunque el sabor sea parecido.

2.7.08

Pan de Salvado

Del Capítulo 25 “Panes Ensangrentados” del libro “Sopas, Pastas & Panes”

Esta receta, originalmente en Langue d’Oc, del Mediodía Francés, fue recogida de un manuscrito del siglo XII. Debemos recordar que en esa época la Santa Inquisición luchó en contra de la Herejía de los Cátaros. En una traducción libre, dice más o menos:
Cuando el condenado por hereje reconozca por fin sus pecados en contra de la Santa Madre Iglesia y su Hijo Predilecto, Su Santidad Inocencio III, por Gracia del Señor Obispo de Roma y de Toda la Cristiandad; ya sea por propia voluntad o por haber sido sometido al suplicio; será llevado en solemne procesión por las calles de su ciudad hasta la pila en donde la Justicia Secular será la encargada de cumplir la voluntad del condenado, castigando su cuerpo hasta la muerte en la hoguera; pero salvando su alma para toda la Eternidad.
Aquel cuya alma ahora estará con el Señor, será llamado el Salvado. Sus cenizas serán dadas a la Hermandad de los Panaderos de Villerouge Termenès, para que la utilicen en la mezcla de harinas, levaduras y aguas para confeccionar los panes de la Villa.

Con muy pocas variaciones, esta receta aún hoy se utiliza. La principal variante, es que no es necesario que sea hereje ni culpable de nada aquel que va a ser quemado y cuyas cenizas se utilicen en el pan.

1.7.08

Sopa de Caracoles

Del Capítulo 6 “Sopas del Reino Animal” del libro “Sopas, Pastas & Panes”

Se coloca agua en una cacerola mediana, una cucharada sopera de aceite de oliva, sal a gusto, un caldito de carne o pollo y trozos de verduras varias cortadas en juliana. Se pone a fuego lento hasta que se ve que más o menos está lista. Se sirve en plato sopero, acompañada de queso rallado.
Si la que ha cocinado la sopa es su mamá, ésta (la sopa) estará tan rica que Usted exclamará: “¡Caracoles! ¡Qué sopa más deliciosa!”. Si repite esta letanía varias veces, entonces la sopa se transformará en una Sopa de ¡Caracoles!
De la misma manera pueden prepararse sopas de ¡Carajos!, ¡Mierdas! o ¡Laconchadesuhermanas!; pero estando su señora madre presente, puede exponerse a un tirón de orejas formidable.
Sopas de ¡Recórcholis!, ¡Voto a Bríos! o ¡Zácates! no son tan ricas ni muy usadas.
Si la que cocina es su esposa, le aconsejamos Sopas de ¡Cuchicuchis!, ¡Cielitos! o ¡Amormíos!. No se recomiendan, en este caso, Sopas de ¡Che,vos! ¡Brujas!, ¡Negras!, ¡Peoresnadas!, y mucho menos ¡Lagranputas!