Nadie pone en duda que el ronquido es un sonido muy molesto para los que dormimos —o intentamos dormir— junto a un roncador y nos despertamos sobresaltados por esa extraña emisión sonora, mezcla de bufidos, resoplidos, gruñidos y frenéticos raspaderos de faringe. Si ustedes una víctima consetudinaria de un roncador, pruebe con estos sencillos trucos:
1- Haga que cambie de posición; para eso, puede efectuar varias maniobras, tales como: Empujarlo hasta que caiga de la cama; eso lo despertará y dejará de roncar, al menos por un rato (cuando esté en el piso, huya para esquivar un seguro zapatazo).
2- Girarlo hasta que quede boca abajo, con la cara hundida en la almohada; eso amortiguará el ronquido, o lo detendrá por falta de aire, o lo asfixiará y fin del problema.
3- Haga que mantenga la boca cerrada: pruebe a atarle las mandíbulas con cinta adhesiva, un hilo o un pañuelo que rodee el cráneo. Al no poder abrir la boca, no saldrá el ronquido. Otro buen truco es rellenar su boca con un trozo de algodón o de tela —lo bastante grande como para que no lo termine deglutiendo. Un buen truco sería coserle la boca, pero debería descoserla cada mañana así que no es recomendable por el consiguiente enchastre de sangre.
4- Haga que se despierte: para eso hay muchas maneras, como patearlo, codearlo, pincharle la barriga, piquete de ojo, baldazo de agua, encender un reflector que apunte a su cara, gritarle al oído... usted descubrirá la forma más adecuada.
5- Haga que destape su nariz antes de ir dormir. Pruebe con una cinta destapacañerías, una manguera con agua y sal, gotas de eucalipto concentrado, mentol, o simplemente ácido muriático (ése no deja nada en el camino).
6- Haga que no beba alcohol ni tome sedantes antes de dormir. Si tiene insomnio, que se joda: despierto no va a roncar. Si desea dormir, dele un martillazo en la cabeza y listo.
7- Déle de tomar este “remedio- infalible- receta- de -la –abuela”: una taza de miel con pimienta, ajenjo y salsa de jengibre. Aunque no sea para los ronquidos, antes de volver a tomar esa porquería, seguro hace un curso para dejar de roncar.
8- No le recomiendo que le rece a San Ex- Pedito porque ése es para las flautulencias. Récele a San Ex-Gañido.
9- Hagale un tratamiento de tipo auto - hipnosis: todas las noches, que se mire al espejo y repita cien veces: no debo roncar.
10- Si nada de esto funciona, decídase por el último recurso: acomode todas sus pertenencias en una valija. ¿Para qué? Muy simple: para echarlo de patitas a la calle.
Agradecemos su consulta y no dude que estamos listos para solucionar todos sus problemas.
Y levantando vuelo... mis dragones
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Y acá van mis niños alados. Ojalá tengan buenos vientos bajo las alas y
vuelen alto y lejos... Realmente, una delicia cada una de las ilustraciones
de Mari...
Hace 8 años.
2 comentarios:
Muchísimas gracias, Patricia.
Intentaremos CADA UNA de estas tácticas.
Iré teniéndoles al tanto de los resultados.
Oh, no... no me hago responsable, especialmente eso de echarlo de patitas a la calle (je, je).
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